Un milagro médico: bebé nace durante una cirugía para extirpar un quiste ovárico de 10 kilos

Nadie vio venir a este hermoso bebé, ni siquiera los medicos.

Lo que comenzó como una cirugía largamente postergada para extirpar un quiste ovárico de gran tamaño se convirtió en uno de los partos más raros que los médicos de Cedars-Sinai hayan presenciado jamás.

Suze Lopez, una enfermera de la sala de emergencias de Bakersfield, California, había vivido durante años con el quiste.

Finalmente se programó la cirugía y como parte del protocolo habitual, se le realizó una prueba de embarazo.

“Efectivamente, después de 17 años de no estar embarazada y de no tener periodos regulares, la prueba de embarazo resultó positiva.” (Suze López, Madre y esposa)

Apenas unos días después, López compartió la noticia con su esposo Andrew durante una cita nocturna en un juego de los Dodgers.

Pero durante el viaje, Suze comenzó a tener un dolor abdominal intenso, por lo que acudieron de inmediato a Cedars-Sinai.

“En cuanto llegamos, la ingresaron y el resto es historia.” (Andrew Lopez, Padre y esposo)

Las imágenes médicas pronto revelaron algo extraordinario:

“…La resonancia magnética llegó y fue impactante. Había un bebé a término completo, situado detrás de un tumor ovárico muy grande, no dentro del útero. Así que se confirmó que se trataba de un embarazo abdominal, lo cual obviamente es un evento extremadamente raro.” (Michael Manuel, MD, oncólogo ginecológico, Providence Cedars-Sinai Tarzana Medical Center)

“Era el bebé que crecía en su abdomen, detrás de la masa, lo que estaba empujando todo hacia afuera. Por eso ella no sabía que estaba embarazada.” (John Ozimek, DO, director médico de Trabajo de Parto y Parto, Cedars-Sinai)

Un equipo multidisciplinario de casi 30 especialistas actuó con rapidez.

Primero, los cirujanos apartaron el quiste de 22 libras, casi 10 kilos. Luego, hicieron nacer al bebé Ryu (pronunciar Rye-U) y lo trasladaron de inmediato a la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN).

“Salió de la anestesia bastante rápido y, para cuando llegamos a la UCIN, ya era un pequeño muy vivaz, prácticamente peleando con nosotros.” (Sara Dayanim, MD, Neonatóloga de Cedars-Sinai Guerin Children’s)

Momentos después, Suze comenzó a presentar una hemorragia.

Pero los médicos estaban preparados y administraron sangre rápidamente mientras los cirujanos trabajaban para salvarle la vida.

Contra todo pronóstico, ambos sobrevivieron.

Ryu nació con un peso de ocho libras, poco más de 3 kilos y medio con una abundante cabellera y, de manera sorprendente, con muy pocas complicaciones.

“Era simplemente un bebé pequeño y adorable, y una especie de milagro.” (John Ozimek, DO, Director Médico de Trabajo de Parto y Nacimiento, Cedars-Sinai)

“Espero que se dé cuenta del lugar tan especial que ocupa en este mundo. Incluso antes de nacer, desafió todas las probabilidades.” (Sara Dayanim, MD, neonatóloga de Cedars-Sinai Guerin Children’s)

Y para una familia profundamente agradecida, Ryu es la prueba viviente de que, a veces, lo imposible sí es posible.

“Cada día es un regalo y nunca voy a desperdiciarlo. Dios me dio a este bebé para que fuera un ejemplo para el mundo de que Dios existe y de que los milagros modernos aún ocurren.” (Suze López, Paciente)

Fuente: Cedars-Sinai