MARTES, 23 de noviembre de 2021 (HealthDay News) -- ¿Busca un adulto mayor una forma de mantener su mente ágil y su cuerpo fuerte? Que comience a trapear.
Unos investigadores de Singapur afirman que las tareas del hogar podrían ser una clave para mantener su cerebro agudo mientras envejece.
Su nuevo estudio encontró que, en los adultos mayores, limpiar la casa se vinculaba con una memoria y una capacidad de atención mejores, y unas piernas más fuertes, lo que previene las caídas.
"Los mensajes de promoción de la salud sobre mantenerse activo no solo deben ser sobre las actividades físicas recreativas o que no son ocupacionales", señaló el coautor del estudio, Shiou-Liang Wee, profesor asociado de ciencias de la salud y sociales del Instituto de Tecnología de Singapur.
"Las tareas del hogar son una actividad con un propósito, que muchos adultos mayores realizan", y que representa una parte significativa de su actividad física de moderada a vigorosa autorreportada, aseguró. Como tal, es un componente clave de la actividad física recreativa.
Los investigadores anotaron que su estudio no prueba que las tareas del hogar causen un pensamiento más agudo o un mejor equilibrio, solo que parece haber un vínculo.
En el estudio, el equipo de Wee observó a casi 500 singapurenses sanos de 21 a 90 años.
Los investigadores utilizaron caminar y la capacidad de levantarse de una silla como indicación de la habilidad física, y pruebas de memoria a corto plazo y diferida, lenguaje, atención y capacidad visoespacial para medir la habilidad mental. (La capacidad visoespacial es clave para la percepción de la profundidad y para moverse sin chocar con los objetos).
También se preguntó a los participantes sobre las tareas del hogar y otros tipos de actividad física que realizaban.
Para el grupo de Wee, las tareas del hogar ligeras incluían lavar los platos, sacar el polvo, hacer la cama, tender la ropa lavada, planchar, organizar y cocinar. Las tareas del hogar intensas incluían limpiar las ventanas, cambiar la ropa de cama, pasar la aspiradora, trapear el suelo y tareas que implicaran usar un serrucho, pintar y reparar.
Entre los participantes más jóvenes, un 36 por ciento dijeron que hacían suficiente actividad física como para cumplir la meta que los investigadores fijaron como beneficiosa, al igual que un 48 por ciento de los participantes mayores.
Pero un 61 por ciento de los participantes más jóvenes y un 66 por ciento de los participantes mayores cumplían esta meta exclusivamente mediante las tareas del hogar, reveló el estudio.
Tras tomar en cuenta otros tipos de actividad física regular, los investigadores encontraron que las tareas del hogar se vinculaban con unas habilidades mentales más agudas y una mejor capacidad física, pero solo entre los participantes mayores.
Las puntuaciones en las pruebas de habilidad mental fueron hasta un 8 por ciento más altas entre los que hacían muchas tareas del hogar, en comparación con los que hacían pocas, encontró el equipo de Lee. Las tareas del hogar también se vincularon con unas puntuaciones más altas en la atención.
Y entre los participantes mayores, el equilibrio y el tiempo que tardaban en ponerse de pie desde una posición sentada fueron mejores entre los que hacían muchas tareas del hogar que entre los que no las hacían.
La Dra. Maria Torroella Carney, jefa de medicina geriátrica y paliativa de Northwell Health en New Hyde Park, Nueva York, anotó que el ejercicio beneficia al cerebro, y que las tareas del hogar son un ejercicio que también implica actividad mental.
"El ejercicio tiene una importancia extrema para el envejecimiento, tanto para la función física como para la cognitiva", aseguró. "Lo sabemos a partir de estudios anteriores, pero quizá no nos demos cuenta de hasta qué grado las tareas del hogar son una actividad física cuya implementación implica una logística. El ejercicio y la planificación son increíblemente importantes para la salud tanto física como cognitiva".
Torroella Carney dijo que la actividad física aumenta la circulación sanguínea a los músculos y al cerebro, lo que ayuda a la función mental.
Las tareas del hogar pueden ser una parte importante de una rutina de ejercicio, aseguró.
"Las tareas del hogar son físicas, pero completarlas también requiere un detallado proceso de pensamiento", señaló Torroella Carney. "Es una tarea que hay que planificar. Hay que utilizar dispositivos, hay que utilizar equipo. Implica una planificación, así que junto con el ejercicio físico hay ejercicio cognitivo".
Entonces, ¿qué recomienda? Muévase.
"Nunca es demasiado tarde para comenzar a hacer ejercicio, como sabemos por otros estudios, no solo este: nunca es demasiado tarde", añadió Torroella Carney.
Los hallazgos se publicaron en la edición en línea del 22 de noviembre de la revista BMJ Open.
Más información
Aprenda más sobre la salud del cerebro en la Asociación del Alzheimer (Alzheimer's Association).
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTES: Shiou-Liang Wee, PhD, associate professor, health and social sciences, Singapore Institute of Technology; Maria Torroella Carney, MD, chief, division of geriatric and palliative medicine, Northwell Health, New Hyde Park, N.Y.; BMJ Open, Nov. 22, 2021, online