MIÉRCOLES, 4 de agosto de 2021 (HealthDay News) -- La contaminación atmosférica puede provocar sufrimiento en los senos paranasales, sugiere una investigación reciente.
Específicamente, la contaminación atmosférica de minúsculas partículas, conocida como PM2.5, podría contribuir a la rinosinusitis crónica, una afección en que los senos paranasales se infectan o irritan, se inflaman, se congestionan intensamente y segregan moco en la garganta durante 12 semanas o más.
"Hasta donde sepamos, este es el primer estudio que informa que la exposición a largo plazo a la contaminación con materia particulada fina aumenta las probabilidades de desarrollar [rinosinusitis crónica], sobre todo la forma más grave de la enfermedad", señaló el autor principal, el Dr. Murugappan Ramanathan, rinólogo y profesor asociado de otorrinolaringología–cirugía de cabeza y cuello de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore.
También puede haber dolor facial, presión y pérdida del olfato. En algunas personas, puede asociarse con depresión, ansiedad, alteraciones del sueño y una baja calidad de vida.
El estudio observó a más de 6,100 estadounidenses de a partir de 18 años. Incluían a más de 2,000 con rinosinusitis crónica, que no la tenían durante hasta cinco años antes del diagnóstico.
Los investigadores utilizaron datos de la Agencia de Protección Ambiental y los códigos postales de los participantes para determinar su exposición a la contaminación con PM2.5, 12, 24, 36 y 60 meses antes del diagnóstico de sinusitis.
Las personas expuestas a unas mayores concentraciones de PM2.5 durante un periodo largo tuvieron más probabilidades de ser diagnosticadas con rinosinusitis crónica, encontró el estudio.
Por ejemplo, la exposición a lo largo de 60 meses se asoció con un aumento de 1.5 veces en el riesgo de rinosinusitis crónica, y con un riesgo casi cinco veces más alto de desarrollar una inflamación intensa en los cuatro senos paranasales, lo que se conoce como pansinusitis.
La PM2.5 es el término para las partículas aéreas de menos de 2.5 micrómetros de tamaño, es decir, unas 30 veces más pequeñas que el diámetro de un cabello humano. Las partículas pueden incluir polvo, tierra, hollín, humo, compuestos orgánicos y metales.
Se ha vinculado con enfermedad cardiaca, cáncer de pulmón, deterioro mental, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, asma y muerte prematura.
Investigaciones anteriores de Ramanathan y sus colaboradores vincularon la PM2.5 con la pérdida del olfato.
Los nuevos hallazgos se publicaron en una edición reciente de la revista American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine.
Más información
La Academia Estadounidense de Médicos de Familia (American Academy of Family Physicians) ofrece más información sobre la sinusitis.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTE: Johns Hopkins Medicine, news release, July 29, 2021