MIÉRCOLES 20 de septiembre (HealthDay News/HispaniCare) -- Un informe reciente asegura que el sistema de salud estadounidense se queda corto en cuanto a lo que hay disponible en otros países desarrollados.
Luego de medir 37 áreas de calidad, EE.UU. únicamente logró un puntaje de 66 de 100, según el informe emitido el miércoles por el Commonwealth Fund. El informe también fue publicado en línea el miércoles en el boletín Health Affairs.
A pesar de invertir la mayor cantidad en la atención de la salud entre los países examinados, según el informe, EE.UU. se clasificó con frecuencia por debajo de Islandia, Francia, Japón, Italia, Suecia y muchos otros. Es más, la atención de la salud varió dramáticamente entre estado y estado y entre hospital y hospital.
"EE.UU. invierte el 16 por ciento de su producto interno bruto en la atención de la salud", aseguró Karen Davis, Presidenta del Commonwealth Fund, durante una conferencia de prensa para anunciar los resultados. "Eso es más del doble del promedio de los países industrializados".
"Como lo han demostrado otros estudios y lo recalcan nuestros siempre crecientes índices de no asegurados, no estamos recibiendo un buen retorno a esta inversión", agregó Davis. De hecho, el 40 por ciento de los estadounidenses asegura haber recibido una atención ineficiente, descoordinada o insegura, anotó.
El informe cubrió cinco áreas básicas de la atención, los resultados de salud, la calidad de la atención, el acceso a la misma, la eficiencia y la equidad. Para obtener los resultados, los autores del informe utilizaron parámetros de excelencia obtenidos por el 10 por ciento de los hospitales de mejor calidad, planes de salud y estados de los EE.UU. Los compararon con los mismos parámetros en otros países.
"En general, los EE.UU. logran calificaciones muy bajas. Una puntuación general de 66 de un posible 100", aseguró la vicepresidenta principal del Commonwealth Fund, Cathy Schoen. "Estos puntajes tan bajos reflejan la brecha entre los promedios nacionales y los parámetros de alto desempeño".
Las brechas existen en todas las áreas básicas que el informe toma en cuenta, aseguró Schoen. "Las consecuencias de esto no son simplemente las cifras", sostuvo. "Hay vidas en juego, tanto en términos de mortalidad como en calidad de vida. Y estamos desperdiciando recursos".
Schoen calculó que se salvarían 150,000 vidas y se ahorrarían $100 mil millones cada año si todo el sistema estadounidense de atención de la salud funcionara según los parámetros en cada área.
Comparados con otros países, los EE.UU. están clasificados cerca al final de la esperanza de vida y al final en cuanto a mortalidad infantil. Además, apenas la mitad de los estadounidenses está recibiendo la atención preventiva recomendada, y esto ocurre en todos los niveles de ingreso, aseguró Schoen.
En cuanto a la atención crónica, el informe halló que dos afecciones, la diabetes y la hipertensión arterial, no se están controlando bien. "Si pudiéramos avanzar hacia los parámetros de mayor desempeño, ahorraríamos hasta $2 mil millones cada año en gastos de atención de la salud y salvaríamos hasta 40,000 vidas, sin contar los millones de días de incapacidad y de productividad perdida", recalcó Schoen.
La falta de coordinación en la atención aumenta los costos duplicando los servicios. Es más, los pacientes están en riesgo por errores médicos. "Perdemos oportunidades de ofrecer la atención adecuada", advirtió.
Algunos hospitales estadounidenses ofrecen casi el 100 por ciento del parámetro de atención, mientras que otros se quedan muy cortos, apuntó Schoen.
La creciente cantidad de pacientes que no tienen seguro también es un problema mayor que limita el acceso a la atención. "Tenemos una epidemia en nuestras manos", comentó Schoen. "La cantidad de personas que no tienen seguro ha aumentado en 6 millones durante los últimos cinco años. El número de estados con un 23 por ciento de personas sin seguro ahora asciende a 12, cuando hace apenas cinco años eran 4. Esto está ocurriendo por todo el país y empeora cada año".
Además, los costos de administrar el sistema de aseguramiento de la salud son significativamente superiores en los EE.UU. en comparación con otros países industrializados que tienen cobertura universal de atención de la salud. Además, los EE.UU. se quedan atrás en actualizar los sistemas de registro médico electrónicos, que podría aumentar la eficiencia y reducir los errores médicos. "Apenas la cuarta parte de los médicos informa utilizar sistemas electrónicos, en comparación con el 80 por ciento de los médicos de otros países", sostuvo Schoen.
También hay muchas disparidades en la equidad de la atención de la salud, comento Schoen. Existen entre los grupos de ingresos, así como entre los raciales y étnicos, anotó.
Para subir el puntaje, el informe hace un llamado a un seguro de salud universal, una mejora en la atención primaria, un mejor manejo de los registros de los pacientes para mejorar la seguridad, productividad y calidad, incentivos de pago para recompensar la atención eficiente, la instalación de sistemas de registro médico electrónicos, invertir más dinero para promover una mejor atención de la salud y establecer metas nacionales para mejorar la atención de la salud en general.
Un experto considera que el sistema estadounidense de atención de la salud sería mejor si no tuviera que depender de un mercado abierto.
"El sistema estadounidense de atención de la salud no está desempeñándose tan bien como debiera y quizá no lo está haciendo muy bien", aseguró Greg Scandlen, fundador de Consumers for Health Care Choices, un grupo de presión para la atención de la salud.
Scandlen considera que el mercado de atención de la salud de los EE.UU. es privado, pero por la regulación y participación del gobierno, no es abierto. Scandlen considera que la solución es permitirle a la gente gastar su propio dinero como les parezca en su propia atención de la salud.
"Por eso, me parece que podríamos tener un sistema muy eficiente y de alta calidad como lo tenemos en todos los demás aspectos de la economía", opinó Scandlen.
Más información
La Agency for Healthcare Research and Quality le puede dar más información acerca de la atención de la salud.