MARTES, 29 de mayo de 2018 (HealthDay News) -- Para prevenir la enfermedad cardiaca, usar los complementos de vitaminas y minerales probablemente sea tirar el dinero, según concluye una nueva revisión de las investigaciones realizadas.
Los hallazgos, publicados el 28 de mayo en la revista Journal of the American College of Cardiology, en gran medida confirman lo que ya se sabía: los complementos quizá sean populares, pero en la mayoría de los casos, no hay evidencias de que protejan contra la enfermedad cardiaca.
Los investigadores dijeron que había una excepción. Un ensayo clínico más reciente realizado en China encontró que los complementos de ácido fólico ayudaron a reducir el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) de los participantes.
Pero, según los expertos, no está claro si se observaría el mismo beneficio en los países en los que el ácido fólico se añade a los productos de granos, y las personas generalmente tienen unos niveles suficientes de esa vitamina B. Se encuentra en las verduras de hojas verdes, la fruta, los fríjoles secos, las arvejas y los frutos secos.
¿La moraleja? Comer una dieta saludable y no confiar en los complementos, dijo el Dr. David Jenkins, que dirigió la revisión.
"Hay unas grandes beneficios para la salud de una dieta basada principalmente en plantas", dijo Jenkins, profesor de ciencias nutricionales en la Universidad de Toronto. "En mi opinión, esa es la manera de hacerlo".
El Dr. Andrew Freeman, un cardiólogo que no participó en la investigación, se mostró de acuerdo.
"Si uno come una dieta saludable rica en alimentos procedentes de plantas, probablemente obtenga todos los nutrientes que necesita sin complementos", señaló Freeman, miembro de la Sección de Prevención de las Enfermedades Cardiovasculares del Colegio Americano de Cardiología (American College of Cardiology).
"Tomar todos esos complementos", añadió, "realmente solo vale para que su orina sea muy cara".
Además, dijo Jenkins, hay evidencias científicas de que ciertos patrones dietéticos sí reducen los riesgos de enfermedad cardiaca y ACV.
La última versión de las directrices dietéticas estadounidenses recomienda tres patrones dietéticos para proteger la salud cardiovascular: la dieta mediterránea tradicional; una dieta vegetariana; y la llamada dieta "estadounidense saludable", con poca carne roja y mucha fruta y verdura.
Lo que las tres tienen en común, dijo Jenkins, es un énfasis en los alimentos procedentes de plantas y una limitación de cosas como la carne roja y el azúcar: Eso significa que hay muchos granos ricos en fibra, frutas y verduras, legumbres y frutos secos, pescado (en las dietas no vegetarianas) y grasas "buenas" no saturadas de fuentes como el aceite de oliva.
En cuanto a los complementos, dijo Jenkins, muchos de los más populares (incluyendo los multivitamínicos, la vitamina C y D, el betacaroteno y el calcio) no han dado buenos resultados en los ensayos clínicos.
Cuando los investigadores los han puesto a prueba, los complementos no han tenido un efecto consistente sobre los riesgos de ataque cardiaco, ACV u otras complicaciones cardiovasculares, encontró la revisión.
Mientras tanto, los ensayos han descubierto algunos posibles riesgos de otros complementos. A lo largo de 21 ensayos de mezclas antioxidantes, los participantes en realidad mostraron un riesgo ligeramente más alto de fallecer durante el periodo de estudio. Lo mismo fue cierto en varios ensayos que probaron la niacina (un tipo de vitamina B), encontró el equipo de Jenkins.
Por otra parte, hay evidencias de que los complementos de ácido fólico podrían ayudar a reducir el riesgo de ACV.
Ese hallazgo provino de un ensayo de 2015 en China en el que los complementos redujeron el riesgo de ACV en personas de mediana edad y de edad avanzada en más o menos un 20 por ciento, según la revisión.
Pero el estudio se realizo en un lugar sin complementación de ácido fólico en el suministro alimentario. Si las personas ya tienen cantidades adecuadas en su dieta, dijo Freeman, los complementos quizá no sean de ayuda.
En general, comentó Freeman, la investigación sobre la capacidad de prevención de la enfermedad de los complementos ha sido decepcionante. Con frecuencia empieza con estudios que muestran que las personas que comen ciertos alimentos, o ciertos nutrientes, tienen un riesgo más bajo de una enfermedad dada. Pero entonces cuando se hacen pruebas a los complementos de ese nutriente, no muestran ningún beneficio.
"Básicamente, cuando aislamos el nutriente de la matriz del alimento, no le hacemos justicia", apuntó Freeman.
Así que el mensaje clave es comer alimentos enteros. Pero, enfatizó Freeman, "no añada simplemente unas verduras a su hamburguesa de queso. Reemplazo la comida basura por alimentos basados en plantas".
Más información
La Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) ofrece consejos para una alimentación saludable para el corazón.
© Derechos de autor 2018, HealthDay