LUNES, 27 de julio (HealthDay News/Dr. Tango) -- La obesidad en Estados Unidos tiene un alto precio, que asciende a $147 mil millones al año en costos médicos directos, poco más del nueve por ciento de los gastos médicos totales, informan los expertos.
De hecho, las personas obesas gastan casi $1,500 más al año en atención médica, cerca de un 41 por ciento más que alguien que tenga un peso promedio. Además de estos costos, están la discapacidad y las muertes prematuras causadas por la obesidad, dijo durante una conferencia de prensa el lunes el Dr. Thomas R. Frieden, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
"La obesidad, junto con la diabetes, son los únicos problemas de salud importantes que están empeorando rápidamente en este país", advirtió Frieden. "El estadounidense promedio tiene ahora un sobrepeso de 23 libras (poco más de diez kilos)".
Frieden realizó sus comentarios en la conferencia "Weight of the Nation" (El peso del país) de los CDC esta semana en Washington, D.C..
Entre 1998 y 2006, las tasas de obesidad en los Estados Unidos aumentaron 37 por ciento y ahora uno de cada tres adultos del país es obeso. Los expertos conocen desde hace tiempo los efectos del sobrepeso en la salud, pero el nuevo informe, publicado en la edición en línea del 27 de julio de la revista Health Affairs, bosqueja el costo de la obesidad.
"Un individuo que tenga un peso normal gastará casi $3,400 al año en costos médicos y esa cifra aumenta a casi $4,870 si es obeso", señaló durante la conferencia de prensa el autor del estudio Eric Finkelstein, director del Programa de economía de la salud pública de RTI en Research Triangle Park, Carolina del Norte.
Entre las personas que tienen Medicare, los gastos promedios de los individuos con peso normal ascienden a casi $4,700 al año, mientras que los costos de los obesos oscilan en unos $6,400 al año, dijo Finkelstein.
El mayor causante de este exceso en los costos son los medicamentos que se venden bajo receta, apuntó Finkelstein. Entre la población de peso normal, los costos de los medicamentos recetados ascienden a $700 al año, pero entre los obesos suben a $1,300 al año, un incremento de 80 por ciento, dijo.
"En Medicare, los costos de obesidad son 72 por ciento más altos tan sólo para los medicamentos recetados", observó Finkelstein. Una persona obesa con Medicare pagará $1,400 más al año en concepto de medicamentos recetados que una persona de peso normal, apuntó.
"El informe de hoy demuestra que la clara relación que existe entre las crecientes tasas de obesidad y los costos médicos es alarmante, aunque no inesperada", dijo en una declaración Lavizzo-Mourey, presidenta y directora ejecutiva de la Robert Wood Johnson Foundation. "La obesidad es la causante de muchas afecciones crónicas, enfermedad cardiaca, diabetes, cáncer, que generan costos exorbitantes que aplastan nuestro sistema de atención de la salud", dijo.
"La única forma de lograr ahorros reales en los gastos de salud en el futuro es mediante esfuerzos que reduzcan la prevalencia de la obesidad y las afecciones de salud relacionadas", apuntó Finkelstein.
Con la esperanza de contener la epidemia de obesidad, los CDC están tomando varias medidas para alertar a la gente sobre este problema y lograr que los estadounidenses hagan los cambios necesarios para reducir la obesidad.
Entre las estrategias que promueven los CDC está el aumentar la disponibilidad de alimentos saludables, promover más opciones de alimentos saludables, fomentar la lactancia materna, estimular la actividad física y crear centros en las comunidades que apoyen la actividad física, enumeró durante la conferencia de prensa el Dr. William H. Dietz, director de la División de nutrición, actividad física y obesidad de los CDC.
"Creo que estas recomendaciones sientan las bases para las intervenciones comunitarias necesarias a fin de revertir este problema en los Estados Unidos", apuntó Dietz.
Uno de los problemas más importantes que enfrentan los estadounidenses es el consumo creciente de gaseosas y otras bebidas azucaradas, que agregan casi 150 calorías a la dieta diaria, dijo Frieden.
Frieden cree que los impuestos a las gaseosas y otras bebidas azucaradas ayudan a reducir el consumo y a elevar los ingresos que se pueden usar para combatir la epidemia de obesidad.
La conclusión de la reunión del lunes es que para frenar la epidemia de obesidad se necesita un gran esfuerzo de la sociedad.
"Para revertir con éxito la epidemia de obesidad hace falta mucho más que esfuerzos individuales", apuntó Frieden. "No llegamos a esta situación en las últimas tres décadas debido a ningún cambio genético o en nuestras preferencias alimenticias. Sino debido a un cambio en nuestro entorno, y sólo un cambio ambiental nos permitirá volver a un camino más saludable", dijo.
Más información
Para saber más acerca de la obesidad y la salud, visite la American Heart Association.