MIÉRCOLES, 29 de septiembre de 2021 (HealthDay News) -- La dieta MIND podría ayudar a las personas mayores a protegerse de la enfermedad de Alzheimer, encuentra un estudio reciente.
La dieta MIND, que fue desarrollada por la difunta Martha Clare Morris, que fue epidemióloga nutricional de la Universidad de Rush, es un híbrido de las dietas mediterránea y DASH.
Las personas del estudio que siguieron la dieta MIND, incluso a una edad más avanzada, no desarrollaron problemas del pensamiento, aseguran los investigadores.
"Algunas personas tienen suficientes placas y ovillos en el cerebro como para recibir un diagnóstico de enfermedad de Alzheimer durante la autopsia, pero no desarrollan una demencia clínica en vida", comentó el investigador, el Dr. Klodian Dhana, profesor asistente de la división de geriatría y medicina paliativa del Colegio Médico Rush, en Chicago. "Algunas tienen la capacidad de mantener la función cognitiva a pesar de la acumulación de estas patologías en el cerebro, y nuestro estudio sugiere que la dieta MIND se asocia con unas mejores funciones cognitivas, independientemente de las patologías cerebrales relacionadas con la enfermedad de Alzheimer".
En el estudio, los investigadores dieron seguimiento a casi 600 personas que completaron unas evaluaciones y pruebas anuales para ver si presentaban problemas de la memoria y el pensamiento. A partir de 2004, los participantes recibieron un cuestionario anual de frecuencia alimenticia, sobre con qué frecuencia habían consumido 144 alimentos en el año anterior.
La dieta MIND tiene 15 componentes, que incluyen a 10 grupos de alimentos que son saludables para el cerebro y cinco que son malsanos; estos últimos incluyen a la carne roja, la mantequilla y la margarina en barra, el queso, las masas y los dulces, y la comida frita o rápida.
La dieta MIND es rica en granos integrales, verduras de hojas y de otros tipos cada día. También se anima a las personas a beber una copa de vino y a consumir frutos secos como refrigerio, y a comer frijoles más o menos cada dos días, a comer carne de aves y bayas al menos dos veces por semana, y pescado al menos una vez por semana.
Pero las personas deben vigilar su consumo de alimentos malsanos, lo que incluye limitar la mantequilla a menos de una cucharadita y media al día, y comer menos de una porción por semana de dulces y masas, queso con toda la grasa, y comida frita o rápida.
"Encontramos que una puntuación más alta en la dieta MIND se asociaba con una memoria y habilidades de pensamiento mejores, independientemente de la patología de la enfermedad de Alzheimer y otras patologías cerebrales comunes relacionadas con la edad. La dieta pareció tener una capacidad protectora, y podría contribuir a la resiliencia cognitiva en las personas mayores", comentó Dhana en un comunicado de prensa de la universidad.
"Los cambios en la dieta pueden influir en el funcionamiento cognitivo y el riesgo de demencia, para bien o para mal", continuó. "Hay unos cambios bastante sencillos en la dieta y el estilo de vida que una persona podría implementar, que podrían ayudar a ralentizar el deterioro cognitivo con la edad, y contribuir a la salud del cerebro".
El informe se publicó en una edición reciente de la revista Journal of Alzheimer's Disease.
Más información
Aprenda más sobre la salud del cerebro en la Asociación del Alzheimer (Alzheimer's Association).
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTES: Rush University Medical Center, news release, Sept. 22, 2021