MARTES, 1 de agosto de 2023 (HealthDay News) -- Los niños que tienen una enfermedad crónica del sistema inmunitario que puede evitar que coman podrían algún día contar con un nuevo tratamiento, décadas después de que la afección se identificara por primera vez.
"Los padres y los médicos quizá no lo sepan, pero se trata de una enfermedad muy prominente y grave en la población pediátrica, y sus números están aumentando porque se relaciona directamente con los alérgenos alimentarios, que también están aumentando", comentó el autor principal del estudio, el Dr. Anil Mishra, director del Centro de Trastornos Eosinofílicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Tulane, en Nueva Orleáns.
"En este estudio, mostramos que tras tratar la enfermedad en animales, la enfermedad desaparece y está en remisión completa", aseguró en un comunicado de prensa de la universidad.
La esofagitis eosinofílica (EE) puede ser provocada por alergias a los alimentos o respiratorias.
Esto hace que los eosinófilos, que son glóbulos blancos, se acumulen en el revestimiento del esófago. Esta reacción hace que el esófago se acorte y que la pared esofágica se engrose, lo que puede dificultar la deglución y hacer que la comida se quede atascada en la garganta.
El estudio, que se llevó a cabo en ratones, encontró que la enfermedad es provocada por la interleucina-18 (IL-18), una proteína implicada en la respuesta inmunitaria innata. Si se produce en exceso, puede provocar inflamación.
Un alérgeno que entra al cuerpo activa una vía que conduce a la liberación de proteínas proinflamatorias como la IL-18 y a una producción de eosinófilos que dañan al esófago, pero los investigadores encontraron que inhibir esta vía NLRP3 y la liberación de la IL-18 previno el desarrollo de la EE ante los alérgenos tanto de los alimentos como respiratorios. Pero la investigación con animales no siempre produce los mismos resultados en los humanos.
La EE se identificó en la década de los 1990, y afecta a alrededor de 1 de cada 2,000 adultos y a 1 de cada 1,500 niños. En los niños, esto puede plantear unos mayores riesgos, porque la dificultad para alimentarse puede conducir a la desnutrición, la pérdida de peso y un crecimiento insuficiente.
Durante muchos años, la EE se diagnosticó erróneamente como enfermedad del reflujo gastroesofágico (ERGE). Pero los medicamentos para la ERGE no eran efectivos para tratar la afección.
Este nuevo hallazgo reemplaza lo que se ha pensado durante décadas, que las células Th2 (células T auxiliares 2) tienen un importante rol al desencadenar la EE, según los investigadores.
"Dada la falta de información sobre los mecanismos y estrategias de tratamiento para la EE, sentimos que los estudios propuestos son altamente relevantes y están a punto de tener un importante impacto, al establecer la significación de la vía NLRP3-IL-18 en la iniciación de la patogénesis de la EE", añadió Mishra.
Los hallazgos se publicaron en la edición del 31 de julio de la revista Nature’s Communications Biology.
Más información
La Academia Americana de Alergias, Asma e Inmunología (American Academy of Allergy, Asthma and Immunology) ofrece más información sobre la esofagitis eosinofílica.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTE: Tulane University, news release, July 31, 2023
