MARTES, 16 de marzo de 2021 (HealthDay News) -- Unos científicos holandeses reportan que han cultivado unas glándulas lagrimales en miniatura que lloran de verdad.
Afirman que estos organoides (unas minúsculas estructuras tridimensionales que imitan la función de los órganos humanos reales) podrían conducir a nuevos tratamientos para la enfermedad ocular y otros trastornos de las glándulas lagrimales.
"Y con algo de suerte, en el futuro, este tipo de organoides podrían incluso ser trasplantables a pacientes con glándulas lagrimales que no funcionen", planteó la investigadora Marie Bannier-Hélaouët, estudiante doctoral de biología e investigación en células madre del Instituto Hubrecht en Utrecht, Países Bajos.
Los investigadores dijeron que los organoides que crearon podrían usarse para estudiar cómo ciertas células de las glándulas lagrimales producen lágrimas, o no logran hacerlo. Al final, quizá incluso sea posible trasplantar estos organoides a personas cuyas glándulas lagrimales no funcionen.
Las glándulas lagrimales se ubican en la parte superior de la cuenca del ojo, y segregan un fluido que lubrica y alimenta a la córnea. Las lágrimas también tienen propiedades antibacterianas.
"La disfunción de las glándulas lagrimales, por ejemplo en el síndrome de Sjögren, puede tener unas graves consecuencias, que incluyen resequedad del ojo, e incluso la ulceración de la córnea. Esto puede, en los casos graves, conducir a la ceguera", señaló la Dra. Rachel Kalmann, una oftalmóloga del Hospital de UMC Utretch que participó en la investigación.
Pero no se sabía exactamente cómo funcionan las glándulas lagrimales, y no había un modelo fiable para estudiarlas.
En este estudio, los investigadores utilizaron la tecnología de organoides para cultivar unas versiones en miniatura de las glándulas lagrimales de ratones y de humanos, y encontraron una forma de hacerlas llorar.
"Los organoides se cultivan mediante el uso de un coctel de factores de crecimiento estimulantes. Tuvimos que modificar el coctel usual para hacer que los organoides fueran capaces de llorar", explicó Bannier-Hélaouët en un comunicado de prensa del Instituto Hubrecht.
Los investigadores encontraron que la combinación adecuada de factores de crecimiento podía inducir a los organoides a llorar.
"Experimentos posteriores revelaron que las distintas células de las glándulas lagrimales producen distintos componentes de las lágrimas. Y esas células responden de formas distintas a los estímulos que inducen a las lágrimas", comentó un miembro del equipo, Yorick Post, que estaba en el Instituto Hubrecht durante este proyecto.
Los investigadores añadieron que estos organoides se pueden utilizar para evaluar nuevos fármacos para las personas que no producen suficientes lágrimas, y para estudiar cómo se forman los cánceres de las glándulas lagrimales y cómo podrían tratarse.
Los hallazgos se publicaron en la edición del 16 de marzo de la revista Cell Stem Cell.
Más información
El Instituto Nacional del Ojo de EE. UU. ofrece más información sobre la resequedad en los ojos.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTE: Hubrecht Institute, news release, March 16, 2021