Casi un tercio de los estudiantes universitarios creen que los medicamentos para el TDAH ayudan con las calificaciones

Pero expertos en la salud adolescente señalan que no hay evidencias que respalden esa creencia
high school students
high school students
Published on

LUNES, 16 de octubre de 2017 (HealthDay News) -- Muchos estudiantes universitarios que abusan de los medicamentos para el TDAH creen erróneamente que hacerlo conducirá a unas mejores calificaciones, sugiere una nueva encuesta.

Investigaciones anteriores encontraron que los estudiantes universitarios utilizan mal de forma rutinaria fármacos como Ritalin y Adderall como "adyuvantes para el estudio". Esto es a pesar del hecho de que no hay evidencias de que los fármacos ayuden a los estudiantes que no tienen un trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).

Según el nuevo estudio, más o menos un 29 por ciento de los estudiantes de nueve universidades de EE. UU. creían que los medicamentos estimulantes mejoraban el rendimiento académico. Muchos otros (un 38 por ciento) "no estaban seguros".

Y esa idea errónea fue particularmente común entre los estudiantes que admitieron que abusaban de los fármacos.

Poco más de un 11 por ciento dijeron que habían usado un medicamento estimulante por motivos "no médicos" en los últimos seis meses. Y de ese grupo, casi dos tercios creían que los fármacos mejorarían sus calificaciones.

Los hallazgos no sorprendieron al Dr. Jess Shatkin, profesor de psiquiatría infantil y adolescente en el Centro Médico Langone de la NYU, en la ciudad de Nueva York.

Pero sí resaltan un problema actual, según Shatkin, que no participó en el estudio.

"Cuando los jóvenes en realidad no tienen TDAH, esos fármacos no son útiles para su rendimiento académico", dijo Shatkin.

Señaló que los riesgos de utilizar mal los fármacos (como una alternación del ritmo cardiaco y la presión arterial, insomnio, una mayor ansiedad e incluso alucinaciones) son más preocupantes.

"Entonces no, no queremos que los estudiantes abusen de esos medicamentos", enfatizó Shatkin.

¿Cómo pararlos? Es posible, según Shatkin, que si hay más estudiantes universitarios que se vuelven conscientes de la realidad (que sus notas no experimentarán una mejora impulsadas por el Ritalin), habrá menos que probarán esos medicamentos.

Pero, comentó, los medicamentos son efectivos para una cosa: para ayudar a los estudiantes atareados a quedarse despiertos hasta más tarde.

"Al menos acaban el trabajo que tienen que entregar mañana, aunque no saquen mejores notas", dijo Shatkin.

Todo esto apunta a unos problemas más amplios, según Shatkin. Muchos estudiantes universitarios necesitan ayuda con temas básicos, como la gestión del tiempo, el manejo del estrés y saber cuidarse en general.

El Dr. Matthew Lorber es director de psiquiatría infantil y adolescente del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.

Dijo que el abuso de los estimulantes es un problema común no solo entre los estudiantes universitarios, sino también entre los de secundaria.

Cuando Lorber receta estimulantes a los jóvenes con TDAH, anima a los padres a que ellos "guarden" los medicamentos. Esto limitará las probabilidades de que su hijo comparta los fármacos con sus amigos.

También orienta a los adolescentes sobre los riesgos de compartir los medicamentos cuando están por cuenta propia en la universidad.

"Debemos comenzar a hablar con los adolescentes sobre los peligros de esos medicamentos para la gente que no tiene TDAH", planteó Lorber, que no formó parte del equipo del estudio.

Los hallazgos se basaron en una encuesta de casi 7,300 estudiantes universitarios. Ninguno había sido diagnosticado con el TDAH en ningún momento.

En general, los estudiantes que creían que los estimulantes mejoran el rendimiento académico tenían 2.5 veces más probabilidades de abusar de los fármacos, frente a sus compañeros que "no estaban seguros". Y los estudiantes del grupo de los que no estaban seguros tenían el doble de probabilidades de utilizar mal los estimulantes que aquellos que no creían que los medicamentos ayudaban con las calificaciones.

Como Shatkin, Lorber dijo que probablemente intentar que los jóvenes abandonen la idea no sea suficiente.

"Pero es información que deben tener, junto con información sobre los riesgos de usar mal los estimulantes", señaló.

Animó a los padres a hablar con sus hijos sobre esos peligros, igual que lo harían respecto al alcohol o las drogas ilegales.

Shatkin recomendó que esas conversaciones sean incluso más amplias. "¿Qué haces cuando estás deprimido? ¿Qué haces cuando estás estresado? Con frecuencia no tenemos esas conversaciones con los jóvenes", lamentó.

Shatkin también sugirió que los padres tengan en mente cuánta presión ponen en sus hijos para que tengan un éxito académico. "No es deseable que cada nota sea una catástrofe para ellos", añadió.

El estudio apareció en una edición anterior de este año de la revista Addictive Behaviors.

Más información

El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de EE. UU. tiene más información sobre el mal uso de los medicamentos recetados.


Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

© Derechos de autor 2017, HealthDay

logo

Related Stories

No stories found.
logo
spanish.healthday.com